Por: Reforma
Los atentados fueron cometidos por dos niñas menores de 13 años que activaron sus explosivos en un concurrido mercado, frecuentado principalmente por desplazados internos de un campamento cercano, en la zona Muna Garage, en las afueras de Maiduguri.
Según el diario nigeriano The Punch, los ataques ocurrieron casi al mismo tiempo en zonas opuestas del mercado.
Los lesionados fueron llevados a hospitales cercanos, mientras socorristas se trasladaron al lugar de los hechos para brindar ayuda a las víctimas, según la Agencia Nacional de Emergencias (NEMA).
Este doble atentado tiene lugar un día después de que tres personas murieron en la aldea de Pallam, al oriente del país, en otro ataque terrorista.
Hoy, otras cuatro personas perdieron la vida durante un ataque de Boko Haram en la localidad de Rom, en el norte de Camerún, según fuentes locales, que explicaron que el ataque ocurrió cuando unos 50 asaltantes llegaron al lugar, robaron el rebaño y quemaron las viviendas, antes de huir.
Boko Haram lucha por imponer un Estado islámico en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiana en el sur.
Desde su aparición en 2009 en Nigeria, desde donde se lanzan ataques a los países fronterizos, el grupo extremista se ha cobrado la vida de más de 20 mil personas, además alrededor de 1.6 millones se han visto obligadas a abandonar sus hogares, según cifras de las Naciones Unidas.
Además de Boko Haram, Nigeria enfrenta amenazas de los Vengadores del Delta del Níger, un grupo insurgente activo en esa zona, que amenazó con destruir el sector petrolero del país.
«Esta ronda de ataques será la más mortífera y tendrá como objetivo las operaciones en alta mar de las multinacionales», advirtió el grupo extremista, que reclama que los beneficios petroleros de la región se reviertan en su población.