Por: Diana Laura Hernández
Victoria, Tam.- Ante la réplica de «es gente muy pequeña y muy chiquita que no quiere a la ciudad», al que recurrió el alcalde Oscar Almaraz para defenderse de quienes cuestionan su administración y que lo ha sumido en una descontrolada polémica de presuntos «sueldazos», el dirigente de la Coparmex en Victoria Luis Torre Aliyán, escribió en su cuenta Facebook de «Torre Abogados»:
«Libertad de expresión, derecho humano que en México es protegido por la constitución y que ha encontrado su verdadera liberación precisamente en las redes sociales».
La publicación del dirigente de la Confederación Patronal de la República Mexicana, es acompañada de un video en el que se pregunta ¿cómo?… nos preguntamos todos, en un mundo donde a partir de las redes sociales se ha vuelto más dinámico, en donde se dicen las cosas que en los medios tradicionales se valora si se publica o no, cuando en realidad es un herramienta determinante democrática de la realidad actual.
Y ante este caso, admitió que hay pantalones en la ciudadanía por lo que se preguntó nuevamente: ¿y los victorenses, tan chiquitos somos?.
Para agregar: «en desafortunada declaración el alcalde ante el golpeteo que ha recibido en las redes sociales, contesto, es gente muy pequeña, muy chiquita que no quiere a la ciudad, y bueno entre cosas que dicen que si los sueldos de la Comapa no es cierto, es mentira».
Al respecto, Torre Aliyán indicó que la gente efectivamente está cansada, está harta de chismes la gente quiere un presidente que dé la cara, que hable claro y de frente.
«Pero en realidad somos tan pequeños y chiquitos los que nos atrevemos a cuestionar algo de su administración, en serio no queremos a Victoria, quienes nos indignamos por trascendidos de sueldos descomunales en la Comapa ¿no será al revés», siguió diciendo.
El dirigente sostuvo que bien sería agarrarle la palabra al alcalde y que responda entonces cómo están las cosas en la Comapa o acaso «¿no merecemos saber porque no queremos a Victoria».
«Por los victorenses estamos hartos de la corrupción y opacidad y los absurdos criterios para ejercer el gasto público municipal, pero sobre todo de la incongruencia entre el decir y el hacer», atajó Torre Aliyán.
